Taller de instrumentos musicales con material reciclado
¿Estás pensando en compartir alguna actividad entretenida con los niños? Un taller de instrumentos musicales con material reciclado es una divertida y económica opción. Además, si hay alguna fiesta para niños a la vista, los podrán jugar con ellos para animar el ambiente.
Al hacer instrumentos reciclados con los pequeños y jugar con ellos, no sólo consigues acercarles un poco al mundo de la música, también les introduces valores de reciclaje y les conciencias sobre el aprovechamiento de los residuos. Pero lo más importante es que se divertirán mucho, tanto al hacerlos como al tocarlos.
A continuación, te dejamos unas fáciles ideas para poner en marcha tu taller infantil de instrumentos reciclados:
Instrumento reciclado de viento: kazoo, turuta o chicharra.
Posiblemente no te suene por esos nombres, pero es un tubo hueco que se utiliza mucho en los carnavales para distorsionar el sonido de la voz. Su elaboración es tremendamente sencilla, así que no tienes excusa para intentarlo.
- Coge los rollos de cartón y decóralos con los niños. Pintadlos con la pintura acrílica y cread vuestros diseños personalizados.
- Con un punzón, haz un agujero a unos dos centímetros del final del tubo.
- Corta un pedazo del papel, tapa uno de los extremos del tubo y sujétalo con la goma elástica.
¡Ya tenéis el kazoo listo para ser utilizado! Podéis conseguir variantes en el sonido si jugáis con distintos largos y alturas del agujero.
Prepárate, porque como los niños le cojan gusto, no lo soltarán.
Flauta de pan con rotuladores viejos
Este instrumento nos pone la piel de gallina cuando escuchamos que alguien le arranca las notas de “El Condor Pasa” o de las B.S.O. de “La Misión” y de “El Último Mohicano”. Posiblemente, a los niños les cueste algo más llegar a esos niveles de armonía, pero seguro que se lo van a pasar bomba intentándolo. ¿Quieres saber cómo hacer una flauta de pan en casa?
- Quita la tapa trasera de los rotuladores y extrae el cartucho de tinta.
- Vuelve a colocar el capuchón trasero en su sitio.
- Por el lado que pinta, corta la punta de un rotulador con el cúter.
- Haz a una marca en el siguiente rotulador a 7mm del corte del primero y descabézalo también.
- Procede a ir cortando el resto de rotuladores, siempre por el lado de la punta y a una diferencia de 7mm con el anterior.
- Pon todos los rotuladores en fila, alineados por el lado que has cortado y sujétalos al palo o a la superficie que hayas elegido. Ésta es la encargada de dar estabilidad y evitar que los tubos del rotulador se balanceen o caigan.
- Sujétalo todo con el cordel o la cinta aislante.
Con estos sencillos pasos, la flauta de pan reciclada está lista y vuestros niños ya pueden aventurarse a lanzar sus primeras notas.
Instrumentos reciclados de percusión: sonajero con cápsulas de café
Las cafeteras de cápsulas han llegado a nuestras vidas y, con ellas, la abundancia de residuos que dejan. Esto no tiene por qué ser una mala noticia, porque estos desperdicios nos dan material para hacer infinidad de manualidades como broches, llaveros y… ¡un divertido sonajero!
- Cogemos las cápsulas de café usadas y les hacemos un orificio en el culo.
- Les pasamos el cordel y hacemos un nudo en cada lado de las cápsulas para que queden sujetas.
- Vamos colocando el otro extremo de los cordeles sobre nuestro palo, tubo, etc. La idea es que éste sea el mango del sonajero.
- Fijamos los cordeles al mango con la cinta de carrocero.
¡Ya estamos listos para iniciarnos en el juego de muñecas!
Pandereta todo en uno
¿Es un tambor? ¿Es una pandereta? Nadie lo tiene claro, pero hace mucho ruido. Este instrumento reciclado será la envidia en las fiestas de Navidad y donde lo lleves. Eso sí, la dificultad de la elaboración de esta pandereta es mayor que la de los otros instrumentos. Por ello, la ayuda de un adulto es imprescindible.
- Lo primero es prepara la lata de bonito. Cortamos y separamos la tapa y la base. Además, con el punzón hacemos un orificio en el lateral, lo suficientemente ancho para que entre el mango que hemos elegido.
- Cogemos las chapas, con un martillo las aplanamos un poco y con el punzón les hacemos un orificio en el medio.
- Enroscamos el alambre al mango. Después de darle las vueltas que veamos necesarias para que quede bien fijo, le vamos introduciendo las chapas, haciendo pasar el alambre por su agujero. En este paso, debemos dejar una distancia con el mango, para que las chapas tengan libertad para moverse y chocar entre sí.
- Fijamos al palo el otro extremo del alambre, igual que el anterior. Para que quede bien fijo, podemos hacer previamente unas perforaciones al mango con un taladro o podemos servirnos de la ayuda de una pistola termoencoladora.
- Introducimos hasta el fondo el palo por el agujero de la lata de bonito y lo fijamos con la termoencoladora.
- Cortamos tiras de tela, que nos servirán para sujetar el cuerpo de la pandereta.
- Cogemos la tela elástica y envolvemos con ella la lata de bonito. Aquí debemos tener cuidado para que quede tensa en las aperturas dejadas por la base y la tapa. Lo fijamos con las tiras de tela que cortamos previamente, cuidándonos siempre de mantener la tensión.
Instrumentos de cuerda reciclados: La guitarra
¿Qué es una fiesta musical si no hay una guitarra? Con estos sencillos pasos, tus niños podrán comenzar su carrera como estrellas del rock o ser unos virtuosos de la guitarra española. Todo queda a su imaginación.
¡Listo! ¿Están tus peques preparados para rasgar las cuerdas?
Con estos instrumentos hechos con material reciclado, tienes género abundante para montar tu escuela de rock en casa o dar el cante en alguna fiesta de cumpleaños con niños.
¡Que empiece la música!